El fiscal Marcelo Pecci deja a sus colegas la responsabilidad de seguir sus pasos
El legado que deja a fiscal Marcelo Pecci a todos los operadores de justicia es el compromiso y la honestidad en sus pasos por el Ministerio Público.
La muerte del fiscal Marcelo Pecci lastima no solo a su familia, amigos y colegas. Golpeó a toda la sociedad y al mundo entero con un impacto enorme que ha generado no solo indignación, también una demostración de fortaleza y firmeza en este duro momento que enfrenta la República con su trágica partida.
Sus colegas tienen la obligación de seguir sus pasos por una mejor justicia, comprometida con los ideales más nobles para tener el país que queremos y necesitamos con suma urgencia.
No solo sus colegas y compañeros de trabajo se manifestaron para honrar su memoria el viernes pasado. Parte de la ciudadanía que añora un país mejor también acompañó la movilización para recordar a Pecci como la persona buena y el profesional intachable e incorruptible que era.
Se necesita replicar su conducta en todos los niveles y esferas de justicia para tener no solo fortaleza para enfrentar al crimen organizado que ha permeado nuestra sociedad y hoy nos tiene a todos los ciudadanos de bien en alerta para enfrentarlo.
Pecci fue asesinado, pero su legado queda tatuado en cada persona que compone la justicia y que busca un cambio real y necesario. No es el momento de callarse, es el momento de levantarse y plantar cara como lo hizo el fiscal Marcelo Pecci, quien aún después de muerto ha unido a los operadores de justicia para elevar la voz y no rendirse ante la criminalidad organizada.